"Nos están volviendo locos"

Nerviosa comenzó a buscar.

Y era tal su presión que hasta se le había olvidado en dónde colocaba el café.

Su marido viéndola en ese estado no le dijo nada, él tenía su propio calvario.

Y desde que lo habían echado de su empleo, estuvo vagando y vagando.

Caminando y pensando cómo podía sortear esta fatal noticia. Pero en resumidas cuentas…no pudo y por esa decisión retornó a su casa, para informárselo a su costilla.

El agua comenzó a hervir, y la doña aunque miraba en su dirección, no se percató de esto.

Su esposo se percató y se levantó, buscó el café y cuando ya estaba abriendo el envase, ella reaccionó y se lo quitó de la mano, y le hizo señas de que se fuera a sentar.

- ¿Y cómo haremos para pagar nuestras deudas?        

- Tendremos que renegociar…

- ¿Y los giros de la nevera?

…Y eso que aún no le hemos comprado su protector eléctrico…

¿Y los de la cocina?

¿Y el juego de ollas que íbamos a comprar…?

¿Y el pago del colegio de los muchachos?

¿Y el uniforme…Y lo que nos falta de los útiles escolares…?

¿Y con qué le pagaremos al portugués del abasto?

…Y recuerda que el mes pasado no le pagaste completo…

…Y tenemos que comprar…falta carne…pollo…arroz…verduras…

¿Y el pago del auto?

…Y aún no le has hecho su mantenimiento preventivo….

¿Y las mesadas de los críos?

…Y están esperando el aumento que tú mismo le ofreciste…

Y el vestido tan bello que prometiste…Tampoco me lo puedes… ¿Comprar?

 Y…Y…

- ¡Ya basta amor! ¿Me quieres matar? – Explotó angustiado ante aquella andanada de ¡Promesas que tendrán que ser…incumplidas!

- ¿Es qué tú no me quieres entender? – Le gritó ella en medio de un ataque nervioso.

De repente él la chequeó y le encontró con sus ojos desorbitados, los cuales rotaban en trescientos sesenta grados oscilando hacia la derecha y de repente virando en sentido contrario.

Sus cabellos también oscilaban en una forma desordenada y anti rítmica.

Y él…empezó a angustiarse; sin querer se dio cuenta que ya la olla en dónde su costillita le iba a hacer café…se estaba secando.

Fue en ese preciso momento en que se percató que ya habían transcurridos varios minutos…más bien como unos veinte minutos.

Corrió y la sacó del fuego, ya no quería tomar nada.

- ¿Te has fijado? – Le preguntó ella en medio de sus gritos.

-  ¿…De qué? – Le respondió en medio de su crisis.

-  ¡Qué bajaremos en nuestra condición social!

¿No te das cuenta? – Visiblemente molesto él le respondió a gritos…

- ¿”Bajaremos en nuestra Condición Social? ¡Me estoy enterando de que estábamos en alguna!

- ¿Qué pensarán nuestros vecinos?

…Cuando vean que hemos caído en desgracia…

…Cuando vengan a pedirnos una ¡“Limosna” para los pobres y desamparados!

…Cuando se percaten de que estamos insolventes…

¡Tendremos que ser nosotros los que tengamos que ir a pedir…

¿Limosna a ellos? ¡Horror!

¡Eso no puede sucedernos…nunca!

…Nos despreciarán…Nos humillarán…

¡Vendrán para quitarnos nuestra…Nevera…Cocina…Lavadora!

¿Y dónde podré guardar nuestra comida?

¿Y en dónde cocinaremos nuestras suculentas comidas?

…Y tendré que humillarme otra vez a lavar como si fuera una mujer…

¿De pueblo?

¡Y aquí no hay ríos, ni lagos…!

¿O tendremos que andar todos sucios y sin poder comer…?

¿Acaso esto es un castigo…?

¿…Y perderemos nuestro carro también?

…Tendremos que volver ¿A “pedir una colita o un aventón”?

…Y lo peor…sucios…porque no tendremos lavadora…con hambre porque no tendremos cocina…y sin comida…

Porque: ¿En dónde podremos guardar nuestras compras?

¡Esto es acabo de mundo!

¡Qué deshonra!

¡Jamás nadie me ha humillado tanto como esto!

Y ciertamente que no tengo un nombre para poder definir…

¿Esto es humano? ¡Yo considero que esto es BESTIAL!

…Ya no tendremos dinero para pagar el colegio…

¡Ya estoy viendo al director sacando a mis hijos…Animal! ¡Bestia!

…Seguramente que nos denunciarán por: la radio…la televisión…

¡Por todos  lados nos avergonzarán!

¿Se mofarán de mí?

¡Mis amigas de los Club en dónde estamos afiliados…! ¿Qué me harán esas desgraciadas…Se atreverán? ¡Malparidas…Degeneradas!

¡Tendremos que inscribirlos en un colegio público!

¡Qué deshonra! ¡Qué humillación!

¿Y ahora; qué será de mí?

Tanto que me ha costado a mí, levantar a esta familia…

Tanto esfuerzo, desvelada siempre porque este carajo no se me meta en la bendita política y ahora ¿Me viene con esto?