“Como todos los días…”




Circulaba en medio de estos mortificantes sucesos en los cuales se te van acumulando día a día…Que si tengo que comprar comida (¿Pero cómo hacerlo…Si cada día vienen aumentando...?  …Como si fuese fácil poder existir en medio de tanto marasmo e insensateces… Digo yo.)…Que si tengo que salir a buscar trabajo…
¿Trabajo? Creo que es mas fácil “matar un burro a mordisco”; ¡Son cosas de estos días!
Bueno en todo caso, algo hay que hacer, que aunque sea caminando uno se va des estresando (…) lo peor es quedarse uno mirando al cielo, como esperando que aquel dichoso maná viene al fin a materializarse…
El caso es que en este devenir; me encuentro en medio de una “reunión” (Y digo: Reunión…Puesto que en la entrada del mercado público al que estoy acudiendo…A ver, qué me encuentro. ¡Pues me vi envuelto! entre una docena de personas…Que se encontraban en medio de una inusitada “conversación” la cuál trataré de resumir de esta forma…)
Traté de mime tamizarme entre la sombra de unos árboles que generosamente nos daban sombra.
Era mas de una decena de personas de ambos sexos, de distintas edades y como es lógico pensar…De distintas ubicaciones.
Destacaba un hombrecito (Lo afirmo ya que su estatura es muy corta) pero de un verbo muy acendrado, de mediana visión pero de una potencia fonética asombrosa. (Tanto así que por espacio de minutos hasta llegué a pensar que era: Un locutor de eventos muy festivos)
-      ¡Nosotros debemos entender que la realidad imperante no es la que la mayoría de nosotros estamos habituados!
Porque no debemos dejarnos manipular… ¡Mas de lo que nos están haciendo!
Ya basta de que nos estén guiando “como simples ovejitas al matadero”
Ya basta de que estén manoseando nuestros principios básicos.
Ya basta. ¡Ya basta! Nosotros somos personas pensantes que andamos pensando en todo momento.
Y Digo: ¡Ya basta! Porque ya basta.
Nuestra voz nos antecedes.
Debemos ejercer ¡todos nuestros derechos que están fundamentados en la “Muy Magna Carta de Nuestros Derechos Cívicos y Personales” que se encuentran resguardados en la ONU… - Y cuando pronunció la siglas de tan importante institución lo hizo parafraseando con una lentitud aberrante mientras recorría visualmente a cada uno de sus oyentes.
Y pudo comprobar que había capturado la atención de todos y cada uno de todos.
Fueron unos instantes en que hasta yo mismo, me vi precisado a despojarme de mis negativos pensamientos y adherirme a los de este señor que dominaba con soltura a todos y cada uno de sus oyentes…A pesar de estar en medio de este calor tan asfixiante.
-      ¡Yo les propongo que nos unamos a todo el “Concierto Universal” que en todo el mundo se está enfocando en este preciso momento! – (Me sentí en medio de un foro mundial. ¡Qué de emociones embargaron mi espíritu y mi ser!
¡Qué alegre me sentí! Una oleada de frío y muy caluroso ventarrón inundó mi existencia- ¡Qué bien!  
Como si fuese co participe de algo en lo que no entendía…Pero que por esas cosas del destino…Me ha llevado.)
Aproveché y me aparté unos metros…Para visualizar a mi alrededor con la intención de poder “ver” si habían algunas cámaras ocultas…Digo de televisión (Tanto regional, como nacionales…Y de repente: ¡Hasta mundiales!…Digo yo.)  Y debo reconocer (Muy a mi pesar, que aunque fui hasta una esquina mas distante de allí…) que tan solo estábamos “unos cuantos pelaos” pendientes de este interlocutor espontaneo.
¡Qué bochorno tan espeluznante! ¡Nadie mas se fijaba ni prestaba atención alguna…! ¡Es que nadie mas?
No obstante y en esa determinación que en ocasiones me embarga…Aproveché y me alejé otros pasos mas…Como para mirar desde otro ángulo…Y quizás podría advertir a extraños sujetos…De esos que se te aparecen cuando menos lo piensan y te arrestan con algún cargo desconocido como: “Traición a la Patria” o…Bueno este mundo es muy prolífico…
    ¿Nadie estaba pendiente de ese mequetrefe?
¡Es que la banalidad confundida con la insensatez no es sinónimo de “algunos”?
…Comencé a meditar…A tratar de razonar: ¿Es que estoy entrando a algún “planeta de simios…Orates…Mezclados con otras cositas mas muy parecidas: ¡por cierto!?
Y andando en estos pensamientos “muy edificantes” por cierto, me encuentro en otra de las esquinas adyacentes a ese sitio público cuando me cercioro a una chica que me llamó poderosamente mi atención…Decidí acercarme, -ya que al igual que yo; se estaban acercando personas de distintos sexos y de ocupaciones surtidas-  el caso es que fui testigo de que la ya mencionada fémina, de algunos veinte y tantos años de existencia, portaba un radio portátil, de esos que funcionan a batería,  el cual lo mantenía en una de sus manos mientras se meneaba con inusitada potencia, mientras sonreía con fervor a todos los que la estábamos presenciando.
El caso es que “en eso; del baile frenético” consistía aquella concentración. Nadie hablaba. Todos la miraban. Mientras la inusitada jovencita se deshacía en extraños movimientos   -que asemejaban a bailes de esos que se ven en estos días-   y yo me quedé solamente mirando mientras en mis adentros comenzaba a pensar: ¿Y qué hago yo cómo un zoquete aquí? Presenciando estos extraños sortilegios.
…Decidí que en verdad…Estos oficios son para personas que no tienen oficio. ¡Porque yo si tengo en que entretenerme y no ser testigo de las locuras de una pobre muchacha cuya locura la ejerce en este tipo de drenaje!
Por lo que estaba llegando a mi conclusión muy básica: ¿Qué hago yo aquí?
-      ¡Mire amigo! – Me vuelvo para ver quién me está importunando cuando logro ver a un hombre de muy avanzada edad, quien mirando con una gravedad   -que me causó mucho pesar-  pues me apuntaba con uno de sus dedos cuya característica primaria que me causó cierto tipo de incertidumbre;  -no lograba darle el grado de marcialidad que acompasara el timbre de su voz aunado a la intensidad de su forma de mirarme…Pues no dejo de reconocer que transcurrido unos minutos… ¡Nada mas pasó!
Di unos pasos a mi derecha y ahí mismo lo dejé   -asombrado pues se quedó como una estatua-  sólo que en este caso, giraba peligrosamente de un lado a otro.
Escuché una voz que me dijo: No le haga caso. Es un borrachito que frecuenta mucho estos lados. Miré a un lado, persiguiendo a quien así se me expresaba y pude ver a una señora que sin prestar mas atención siguió su camino.
Por lo que sin perder tiempo alguno, me dediqué a lo que me había motivado el ir a ese mercado.
Continué pues mi periplo…Pero ya me había despojado de aquellos pensamientos tan lúgubres y nefastos. Y para ser sincero: ¡Me alivió ese día! Tanto fue así…Qué obvié el motivo central: ¡Comprar comida!
Por lo que me dediqué a hurgar en todo el sitio.

Y para cuando ya me encontraba fastidiado…Me volví a mi casa.





Nota:
Internet utiliza cookies para optimizar la mejor experiencia al usuario en nuestro sitio web.
Si continúa utilizando este sitio, asumiremos que está de acuerdo. ¡Gracias por su preferencia!


(Enviado al Blogs.)

Las leyes de la Unión Europea exigen que le brindes información sobre las cookies utilizadas en tu blog a los visitantes de la UE. En muchos casos, también exigen que obtengas consentimiento.

Como cortesía, agregamos un aviso a tu blog para explicar el uso de Google de determinadas cookies de Blogger y Google, incluido el uso de cookies de Google Analytics y AdSense.

Tú tienes la responsabilidad de confirmar que este aviso realmente funcione para tu blog y que se muestre. Si usas otras cookies, por ejemplo, si agregaste elementos externos, es posible que este aviso no funcione en tu caso. 
Obtén más información sobre este aviso y tus responsabilidades.
Se modificó tu configuración de HTTPS. Ahora, todos los visitantes pueden ver tu blog mediante una conexión encriptada si visitan https://belbaltodano.blogspot.com. Los vínculos y marcadores existentes a tu blog seguirán funcionando. Obtén más información.