“Después de mí… ¡Nadie mas!”

Hoy: Miércoles 08 de mayo del 2. 014.-

- ¡Nos están botando!

Así entre risas y festejos…Aquella ronda estaba concluida.

- …Bueno Gersy… - Comenzó diciéndole Carmen.

- ¿…Me podrías dar la colita?

- ¡Claro amiga…Perdón colega Carmencita!

Susan, se acercó al grupito en compañía de Marisela.

- Me encantó todo, colega. – Le manifestó Marisela, quien venía acompañada de su esposo.

- ¿Cómo sigues después de todo y me refiero a tu salud?

- Bueno  los médicos  le informaron a mi esposo, que había sufrido una descompensación y que con un tratamiento y reposo, debería de mejorar rápido.

- ¿Y ahora, cómo te sientes?

- En verdad. Pienso, que estoy un poquito mejor.

- ¿Y tú embarazó…Sufrió el bebe?

-- Los médicos, dicen que no sufrió nada.

- ¡Qué maravillosa es la obra del Creador!

¿Verdad, colega?

- ¡Sin lugar a dudas! Todo bien.

- ¿Y no hay secuelas posteriores?

- Los médicos me dieron de alta, después de una cantidad inmensa de exámenes. Y todos indicaron, que todo está bien.

- ¡Gloria a Dios!

- ¡Así es!

- Y menos mal  que Gersy, se repuso rápidamente. – Intervino Carmen.

- ¡Sí! Y gracias a Dios, estamos todos reunidos y sanitos. – Opinó Susan

Poco a poco, fueron desalojando el recinto.

Y realmente se sentían tan complacidos, que se resistían a irse.

Se re-encontraron nuevamente en el área del estacionamiento y en forma espontanea, siguieron con su alegre ágape.

De repente, una llamada al celular de Gersy.

- ¿Aló? Sí soy yo… - Contestó y de repente, se le nubló todo y poco a poco, se fue desplomándose.

- ¿En dónde…?

Marisela que estaba enfrente de ella, escuchó todo y al instante, la auxilió impidiéndose que al caer, se rompiera la cabeza.

Gersy, iba cayendo pero no soltó su teléfono.

Todos corrieron y la auxiliaron. Ese momento fue de mucha tensión.