- ¡Vete y déjanos en paz! – Lo conminó violentamente y sin miramiento alguno.
Ellos se quedaron asombrados.
Con su don de mando, fuerte, seco y rotundo.
Disimularon los efectos, pero en el fondo ellos, quedaron…entumecidos…
El servidor recogió violentamente todo y desapareció a la velocidad del rayo.
Los dos amigos se miraron entre sí y se sonrieron en señal de victoria.
Pedrín pensó…
(…Tiene Poder este hombre. Se le ve enérgico, terminante y por la cara de asombro de ese tipito…al parecer le tiene miedo. Es bueno estar pendiente…)
Y para disimular…agregó estas palabras…  
- Al parecer hay personas que con su imprudencia, hacen daño…ciertamente que sí.  – Soltó a manera de romper el hielo, producido por tan nefasto regaño.
- ¡Así es amigo Pedro! Pero hay que tratarlos de esta forma y ya viste el resultado…
¡Ustedes…todos…a brincar! – Los aludidos comenzaron a brincar en forma desordenada.
- ¡Ya, quietos todos! – Y todos a la voz de mando, obedecieron.
José se percató de todo y dijo lo siguiente…
- Y volviendo a lo nuestro y ya sin mirones que nos acosen…
¿En qué he pecado para que me ataquen así…?
¡Tan despiadados! ¡Me caen en mansalva, todos!
¿Es que me quieren matar o qué?
¿…O es que estamos en el Inframundo?
Me cargan loco. No me dejan ni respirar.
Ni siquiera he tenido el tiempo suficiente como para meditar.
¡No sé ni qué hacer, como tampoco sé qué decir…!
¡Mira me han pateado…!
! Me han caído a golpes…!
¡Me han tirado piedras…!
¿Qué más debo esperar?
¿A qué se debe este empecinamiento?
…Me han sometido esos “diminutos” y me han levantado tal como si fuese una hoja de papel…
¡Dios! (Al pronunciar este nombre…El misterioso ser hizo una mueca con la cara y lanzó un adefesio con sus manos. Esta acción descontroló a los amigos, además de todas las personas…Ninguna se quedó tranquila…Hubo un espanto entre ellos…)
José no atinó a mas nada y tan solo soltó la pregunta…
- ¿Qué he hecho…?
El aludido estremeció ostensiblemente su cuerpo y pasados unos segundos, se acomodó y continuó tal como si nada hubiese ocurrido…
- Por partes. Sin apresuramientos…
En primer lugar: Muy pocas veces los he visto tan enojados con alguien…
(¡Y yo los conozco y muy bien, a todos!)
Por lo que me animo a preguntarte: ¿Qué les hiciste?
- ¡Nada! ¡Ni sabía de su existencia! ¿Y qué daño les puedo hacer yo a ellos?
- ¿Los has atacado, acaso?
- NO.
- ¿Los has retado…?
- NO.
- ¿Les has faltado el respeto…?
- Tampoco.
- Vamos por partes, para que podamos entender el entorno. Debemos ser puntuales. No me mientas…
Mira algo has tenido que haberles hecho.
¡Ellos no atacan así por así!
- ¡Nada, absolutamente nada!
- No. No creo eso y me perdonas. Pero no puedo creer que te estén atacando… ¡por nada!
- Perdón por interrumpir, pero en lo único que él ha hecho es que no cree en ellos. ¡Hasta que los vio!
- …Esa no es causal. Algo tuvo que haberles hecho enojar. Porque mucha gente no cree, pero no por eso los atacan. ¡Dime la verdad!
¿Por qué? si no eres sincero conmigo…
¿Cómo te podré salvar de ellos?
- …Bueno en verdad, él se estaba burlando de la magia de Miche…y de ellos…
- ¡Ah….! ¿Con que burlandito…No?  
¿Viste…?
¡Ahora si que nos estamos entendiendo!
¿Viste que no hay más locura que la que se ignora?
¡Yo lo sabia…lo sabia!
¡Si que entiendo todo este entuerto…!
…Ahora si que se montó la gata a la batea…
Y están muy furiosos con este joven…
¡Claro, con razón! ¡Claro que si tienen toda la razón!
- El catedrático husmeaba por los rincones, pero nada sucedía. Era hasta cómico verlo. Se inclinaba debajo de cada silla…de las mesas…levantaba los materos… ¡Y hasta las botellas las movía, pensando en que se estuvieran escondiendo entre ellas o debajo!
Pero en verdad, estaba muy molesto. Ofendido. Ansiaba descubrir aunque sea a uno solo…pero no lo pudo encontrar…
- ¡Tienen que tener mucho cuidado!
¡No debes darle la espalda nunca!
…Es qué si me llego a encontrar…tan sólo a uno sólo… ¡Uno, nada mas que uno! Lo destri…. – Y volviendo la cabeza se dio cuenta de que estaban pendientes de todo cuanto él pronunciara, así que carraspeó con fuerza y aclarando su garganta, les dijo…
---Aún sigo enamorado….de tan bella damisela…Y por esa razón ando desesperado en encontrarlos…Ya saben…cuando el corazón está enamorado…

Los chamacos…les costó tragar…era muy fuerte…pero a la final, lo hicieron… 

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