“Después de mí… ¡Nadie mas!”


Yo los perdono de todo corazón.
- ¿Perdonarnos a nosotros y  por qué?
¿Qué te estás creyendo tú? – Le espetó violentamente Susan.
- Mi queridita y amena compañera de estudios de mi bella y gentil esposa.
…Escúchame mi  linda y atractiva colega de mi costillita…
- …Susan…Susan…Quédate quieta. – Le sentenció Miguel, un tanto molesto y  ante la incomodidad de esa situación.
Román, los veía y una sonrisa en su cara se reflejaba.
Este gesto, indignaba a Susan y molestaba a Miguel.
 - …Me está costando una verdadera intensidad…
Ya que reconociendo que ya ustedes son unos profesionales de la “PSICOLOGIA UNIVERSAL” aún les cueste aprender que la vida es necesaria asumirla tal cual nos la presentan.
La vida es solamente una sola. ¿No lo sabían?
Ustedes requieren invertirse en los grandes conocimientos de nuestro diario vivir.
Yo por ejemplo  he de reconocer, que cada día que pasa…
Voy aprendiendo cada vez más y más.
Pero en el caso de ustedes  que recién se están graduando, les noto que les falta mucho.
Ustedes tienen que aprender que la vida es así.
O lo agarras tú o lo agarra otro.
No sea tan infantil. La vida es una sola.
Ustedes no aprenderán nunca.
¡Están condenados al fregadero! ¡Despierten y reaccionen!
- ¿Y para ti, la vida es pasar por encima de quien sea? – Le increpó Susan.
- La vida  mi bella inquisidora, es la vida. Nunca te va a esperar. Nunca va a ir detrás de ti ni te esperará a que tú te decidas.
O lo tomas…U otro se lo lleva. Así de sencillo.
- ¿Y para ti es licito pasar por encima de cualquiera? – Susan ya casi no se podía reprimir a sí misma – Avasallar, amansar y subyugar a pobres mujeres que la única culpa que tienen  es que se enamoran de ti. ¿Esto es justo?
- ¿La vida…La vida?  Nunca te va a esperar.
Tú nunca la vas a entender.
- ¿Ah, y tú sí?
- La vivo tal cual se me presenta.
No me estoy rompiendo el coco, como ustedes.
Quemándose las pestañas en la Universidad, sufriendo y padeciendo, para poder pasar un miserable examen y seguir en ese calvario, ya que me faltan tantos semestres y…Y…
¡No mija…Vive  y deja vivir a los demás!
¡No seas egoísta!
- ¿Egoísta yo?
- ¡Sí, egoísta tú mi dulce contrincante!
- ¿Y en que he sido egoísta?
- En encompincharte con tus amigotes y en tumbarme una de mis diversiones favoritas.
- ¿Diversiones favoritas?
¿A eso llamas “Diversiones favoritas”?
¡Por favor!
- Yo jamás le iría a tumbar nada a nadie.
Yo si vivo y dejo vivir a los demás.
¿Total…A nadie estoy perjudicando?
- ¿Cómo que no?
- No hay peor ciego que el que no quiere ver.
- ¿Y tú si ves, verdad?
- ¡Plenamente y a la perfección!
- ¡Tú lo que eres,  es un cínico!
- Yo jamás sería capaz en ir a tumbarte un “Vacilón”.
¡Jamás lo haría!
- ¿Vacilón? ¿Y a ti no te preocupa lo que pueda pensar y sufrir tu pobre esposa?
- Ojos que no ven…Además: “Polvo eres y polvo serás”
¿Es así verdad?
- ¡Cínico!
- Aprendan a vivir. Aprendan a recibir lo que la vida les dé.
- ¡Toda mi vida me han enseñado a respetar!
- Yo también me respeto.
- ¿Respeto…Acaso conoces el significado de esa palabra?








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