"Después de mí... ¡Nadie mas!"









Después de mí… ¡Nadie mas!

“Para amar  lo que  hace  falta es… ¡Amar!”

….Jueves…23 de octubre del 2. 014….


…Esta novela viene desde…Búscalo y lo encontrarás.


- ¡Qué barbaridad de loco! – Exclamó Susan, asombrada de lo farsante que era.
- ¿Y si le proponemos este desafío…Lo aceptaría? ¡Sí!
Ni lo pensó. De una vez, les aceptó todo.
Pero aún no le hemos hablado ni de sueldo, ni de sus comisiones que va a ganar por el grupo…
¡No importa…Acepto!
Y si he de trabajar a pleno sol…
¡Dispuesto estoy!
- ¿Y ni siquiera sabía cuánto le iban a pagar a él? – Preguntó ansiosa Adriana.
- Él le dijo a Alcides  mi esposo, que ya él había escudriñado a esa empresa.
¡Ya estaba dateado! No es tan “pendejo”, como muchos sospechan.
- ¿Ése…? ¡Pendejo soy yo!
Que me he quemado mis pestañas estudiando y estudiando, ¡preparándome todo el tiempo!
¡Trabajo…Trabajo…! ¿…Y qué…Qué…?
- …Migue…Migue…No te subestimes así. ¡Ya te dije, que tú vales muchísimo más que él!
- ¿Pero bueno, gordis…Vas a seguir con ése tema?
- …Perdón…Perdón…No quise decir eso…Pero es que me da mucha cólera.
En cambio vienen esta “clase de personas” y ¡Zas! Se lo dan todo.
- ¡Bueno, continuemos con mi relato!
¡Yo misma creía que ése era un loco de carretera! 
¿Loco ése?
¡Ya te aviso!
- Yo en verdad, siempre creí  eso… - Les confesó Adriana.
- ¡Yo también, se los confieso! – Se añadió Susan.
- ¡…Pues cáiganse de esa mata, ustedes dos! ¡Y todos los que se crean, que no piensa!
¡Y piensa hasta el cansancio! Cada paso que da…Lo tiene ya estudiado.
¡Tiene una velocidad de raciocinio…Bárbara!
Ese tipo “se las trae” ya se los he venido diciendo…
- ¿De verdad Mary?
- ¡Sí Susan!
- ¡Increíble Mary…Increíble!
- ¡Pues entérate Adriana de una buena vez! ¡Ése es un genio en persona!
- …Un genio maquiavélico…
- Tú lo has dicho Migue. ¡Pero de que es un “Genio”…Lo es!
- Yo lo venía sospechando. Siempre me he dicho: ¡O es un loco o es un genio en acción!
Porque, diera la impresión de que no las piensa…
- ¡Pero es un Jet!
- Sí Mary y supersónico.
- ¡Cosas veredes Sancho! – Exclamó Adriana en voz alta.



....Esta novela continuará...

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