“Después de mí… ¡Nadie mas!”

“Este  relato  se  origina  por el  trato  que  una  de  las  partes  le dio  a  la otra …Produciendo  con  su acción  efectos  muy  lamentables…”

…Esta novela viene desde…

- ¡Explícate Adriana, por favor! ¿Contrastante…Ése…?  Todo esto me mantiene en un profundo y absorbente ambiente muy depresivo, por cierto. ¿Pero qué podré hacer…? Explicame amiga querida…Trata de traerme alguna luz para esta confusión sin limite…

- ¡Sí  Susan, claro que sí!  …Y me explico:

¡Jamás había conocido esas aristas tan contrastantes!

- ¿Cuáles?

- …Ya va Susan, ya va…

- …Déjala  que exponga su opinión, Susan. Por favor…

- ¡Gracias Marisela!

…Nunca he conocido en persona a una ser  con estas características: ¡Únicas y sin igual!

…Esto es inconcebible…Intolerante y absolutamente: ¡Degradante!

No solamente lo hemos agarrado con las manos en la masa. Tal como le ha sucedido a él. 

En donde lo han confrontado. Lo han puesto en tres y dos. 

¡Es una personalidad totalmente: Patologógica! –Y no sé cuál de los dos está peor que el otro-

Pero esto es para locos. Y nos rebasa, y quizás porque somos arte y parte, por la vinculación que tenemos y mantenemos con nuestra común amiga. 

Pero… ¡Jamás en mi vida, he contemplado a alguien como este “señor” –que le queda muy grande, entre paréntesis- ¿Hombre “eso”¡…Le queda grandísimo!?

Sin vergüenza, sin rubor alguno… ¿Cómo puede vivir así…? ¡Es un desalmado! ¡Loco”

¡Hasta lo han  perseguirlo con pistola en mano!  

Y me he hecho esta misma pregunta en innumerables ocasiones… ¿Cómo puede definirse a “ese ser”?

¡Me rindo y me rendiré siempre…Salvaje esperpento!

Enfrentarse a la más cruda realidad, en dónde no solamente, su propia esposa…

Si no, nosotros también. Y por los relatos, que he escuchado…Han sido muy crudos y descarnados. 

¡Esto es para vivirlo y no para contarlo!

Y en dónde, cualquier persona normal…  ¡Seguramente se chorrearía! 

- Es muy cierto  lo que dices Adriana, porque inclusive a nosotros nos ha dado…  

¡Pena ajena! Fíjate ésa vez… ¡El viejo, empuñó su propia pistola y lo persiguió…!

-Y pobrecito ese anciano- Lo entiendo y lo asimilo de esta forma: 

¡Él y solamente él, siente esa necesidad aberrante por defenderse de este tipo de “personitas”

- ¡Y…Se desapareció de toda la faz! ¡Qué barbaro es “ese”! 

- ¡Sí, es cierto, tal como lo dice Migue! Pero lo que más me ha llamado la atención: Es que después se aparece ante nosotros… ¡Cómo si nada!

- Y lo peor… ¡Con otra mujer a cuesta! – Agregó Marisela.

- Para mí…  ¡Es un Depredador Sexual! Un ser con el que hay que tener MUCHO CUIDADO. 

No es un ejemplar digno de encomio. Es muy recesivo y peligroso. Bueno ¡es mi opinión! 

Sé y entiendo que el tipo tiene un sex apil que lo hace atractivo y atrayente…Pero no me pueden negar lo inmensamente peligroso que es… ¡Una bomba que puede explotarle a cualquiera en las manos!

- ¿Y es qué no se cansa, Susan?

...Esta novela continuará....