“Después de mí… ¡Nadie mas!”

“Esta  es  una  historia  de  Amor.

¿Será  que  se  enceguece  el (O la) que  se  enamora…?

…En  todo  caso… ¿Será  que  todos  tenemos  derecho  a…?

…Esta novela viene desde…

…La verdad, es  que a mí, ya me están empezando a preocupar los quebrantos de salud de mi esposa.

Y estoy ansioso de que salga de esta tercera “Barriga” y que nazca sano y salvo mi tercer heredero.

¡Confío en Dios, que todo saldrá bien y que mi adorada, vuelva a brillar como siempre lo ha hecho!

¡Y para alegría de todos nosotros…Que nos lo merecemos!

¡Arriba los corazones! ¡Aleluya!

¡Soy optimista de nacimiento!

…Y ustedes…Me tendrán que disculpar…

Mi trabajo, siempre me esclaviza…

¿Y qué más puedo hacer? 

…Yo soy un esclavo del trabajo… ¡Viva el trabajo!

Y gracias a mis labores…Mi esposa, mis hijos y yo, vivimos muy bien…Aparte de otras personas…

¡Nada nos falta!  …No es mi culpa…

Bueno…Me tengo que ir…

El trabajo…El trabajo.

¡Un placer verlos nuevamente! 

Y ya saben, si mi esposita requiere de más dinero…

Me llaman.  No tengan pena alguna.

¡Chao!

Y diciendo y saliendo. Prácticamente, sus últimas palabras las pronunció ya a varios metros de distancia. Iba agarradito de la mano, de su amiguita.

- …Una compañera de…Trabajo… ¡Chao, chao!

…Y no sigan “Pensando cositas malas de mí”…

¡…Se les quiere a todos…Chao…Chao…!

Todos se quedaron mirándolo, hasta que desapareció por los pasillos.

Una terrible sensación de orfandad…

Quedó flotando  en el aire…

Mirando sin pensar y sin sentir…

- …Es en este tipo de momento…

En que yo me pregunto: ¿Qué estoy haciendo aquí?

Se preguntó Miguel, mirando hacia dónde ya no estaba Román.

- …Yo te contesto y me lo digo a mí misma: ¡Sí, aquí estoy! Yo estoy aquí…No es por ése…

¡Es por ella!

- …Sin embargo Susan…

Miguelino, tiene mucha razón… ¡Demasiada! – Fue muy concluyente  Alcides.

Esa sensación de rabia ahogada. Frustrante. Avasalladora.

- ¿…Será qué estamos en el bando equivocado…?

- ¿Bando equivocado, gordis? ¿Qué te está pasando? ¿Quieres irte con “Ése”?

- …Por lo menos…Lo está disfrutando.

¡Está como que si nada estuviera pasando!

Y…Mientras nosotros estamos aquí, comiéndonos nuestras poquísimas uñas…Qué aún nos queda. ¿Dime mi reina linda…Cuál es tu diagnóstico, de este tipo?

- ¡Y no necesito de ningún estudio para decirte, quién es “Ése bicho de tres patas”!

¡Ése es un: Degenerado – Un Engendro  - Un Déspota – Un depravado - Un aborto de la naturaleza – Un monstruo – Un libertino – Un licencioso - Una aberración - Una bestia – Un sátrapa – Un cínico – Un execrable - Un maldito! ¡…Mira que estoy hirviendo del coraje…Jamás había visto un ser así…Y con figura de hombre!

¡Yo nunca he odiado a nadie!

Nunca…He llenado mi corazón con odio…

¡Pero es que…Es que…Este tipo! ¡Es falso – Farisaico – Obsceno – Libidinoso – Es…Es…!

- ¡Ya Susan, ya! ¡Migue…Llévatela a dar una vuelta por ahí…! ¡Corre, sácala de aquí…Capaz que le de algo malo a ella, también!

- ¡…Es ése engendro…El que debería estar aquí…Llorando por su “Queridísima esposita”! 

…Y no nosotros… ¿Y por qué éste mundo es así? ¿Por qué tipos como ése…Ríen, mientras nosotros…Lloramos?

....Continuará....