"Asechanzas"






Asechanzas


Este relato surgió después de una tenebrosa noche de espanto.
He tratado de ser fiel a lo acontecido.



...Agosto...


Estoy sintiendo muchas sensaciones.
Muchas son imprecisas…otras pasan de largo.
Sentimientos de extremo odio. Envidia.
Mucha congoja. Demasiada imprecisión.
Mucho calor y frío. Pienso que ésta cerca tiene mucha historia que si me la contara…
Diversas escenas ha vivido en todos estos años en que la han construido.
No, no quiero entrar en esta historia. No me interesa.
No le encuentro sentido alguno.
Al parecer mi opinión nunca es tomada en cuenta.
Me arrastran sin compasión alguna y hasta me estoy presintiendo es que: “Me están obligando a ver todo esto y no tengo escapatoria…”
¿Qué nueva maldición me esperará a partir de ahora mismo?”
Veo rostros masculinos y muchos femeninos.
Seguramente fragmentos de sus historias se han quedado impresos acá. 
Lo que no entiendo es: ¿Y qué tengo que ver con “estos”?
¿Pero cómo es posible?  No entiendo ni jota.
¿Quiere decir que ésta construcción hecha por hombres…Ha grabado todo cuanto ha pasado a su alrededor? 
¡Increíble…Pero me cuesta creerlo!
Parece que ha condensado la historia de estas dos casas.
¿Cuántos años tendrá de construida?
¿Quién lo hizo?
¿Cuántas personas estarán impresas en sus sentimientos, sensaciones, querencias…cuántas?
Así como percibo sentimientos y vivencias; esto que me está llegando es muy bajo…
Y no me gusta…Por aquí han transitado muchos seres nocturnos y con muy malos sentimientos.
Seres dañinos. Con sus bajísimas pasiones. Mucho odio. Deseos mal habidos.
¡Dios sácame de aquí! Esto es maligno.
¡No quiero seguir aquí!
Estoy visualizando…violaciones…posesiones y violaciones…no sé quiénes son.
¡Y no me interesa!
Me duele, me humilla y me hace sentir estas bajas pasiones. No quiero permanecer en este sitio. ¡Zape…bien lejos con todo esto!
Debo concentrarme en avanzar o en retroceder, pero no permanecer acá.
Me concentro en lo de la puntas de mis dedos…ahora ya parece que están avanzando mis falanges. Me da la impresión de que ya mis dedos han salido…falta la palma de mi mano. ¡Apúrate, salgamos de este infierno!)
- ¿Cuánto tiempo ha transcurrido? Lo ignoro. Y me está dando la impresión de que ya estoy pasando esto. Mi espíritu me está anunciando un triunfo.
¿Será cierta tanta alegría? Mi espíritu me llena de regocijo y esto me tranquiliza.
A decir verdad; me siento gratificado al abandonar estos estados angustiantes y degradantes. ¿Pero será cierto todo lo qué he percibido? Por lo pronto puedo anunciarme a mí mismo, que fueron hartamente degradantes y asfixiantes.
¡Qué de vivencia arropan esas paredes!
…Veo a una mujer joven…es trigueña…buena moza…y está pendiente de la hora. Mira con mucha insistencia su reloj de pulsera,  la veo muy inquieta. Camina de un lado a otra.

Algo muy importante, la está apremiando. Está sudorosa, se frota constantemente las palmas de sus manos, aprovechando para ver nuevamente la hora.









No hay comentarios:

Publicar un comentario